Un nuevo escándalo rodea los cuarenta carrotanques contratados por el Gobierno para suministrar agua en algunas zonas de La Guajira, luego de que se difundiera un video en el que uno de los vehículos se hunde en la arena del desierto, generando una ola de críticas y debate sobre la idoneidad de la empresa proveedora y la planificación del proyecto.
El video compartido por el senador Alfredo Deluque ha avivado la controversia en torno a los polémicos carrotanques, mostrando cómo uno de ellos queda enterrado en el desierto de la punta norte de Colombia. Deluque señaló que esta situación es consecuencia de decisiones apresuradas y mal planificadas, sin considerar la experiencia previa ni las condiciones del terreno.
Según declaraciones del senador, la contratación de los carrotanques fue realizada sin una adecuada planificación, desconociendo el territorio y sin tener en cuenta la experiencia necesaria. Expertos en vías de La Guajira habían advertido previamente que vehículos de doble tracción como estos no son aptos para ingresar a las rancherías cargados de agua debido a su peso, lo que podría dañar las "carreteras" del área.
La situación se complicó aún más cuando se necesitó tirar el agua del carrotanque atrapado para poder desenterrarlo, perdiendo alrededor de 16.000 litros del recurso escaso en la región. A pesar de estas críticas, la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo (Ungrd) consideró exitosa la jornada del Festival por el agua en La Guajira.
Además, se reveló que además de los cuarenta carrotanques ya comprados, se solicitó la adquisición de otros veinte más, lo que representaría un segundo contrato con el mismo proveedor en menos de tres meses. Esta situación ha generado aún más cuestionamientos sobre la gestión y planificación del proyecto.