Jueves, 12 de diciembre de 2024 Suscríbase
Temas
Petro

Renunció el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla

El presidente Gustavo Petro comentó en que el sistema está diseñado para “extorsionar” a los ministros de Hacienda e insistió que “buscan un golpe” en su contra.

Presidente Gustavo Petro y Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla/ Revista Alternativa

El presidente Gustavo Petro le pidió la renuncia al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, después de conocerse varios detalles esta semana de su presunta relación con el direciconamiento de contratos para congresistas de la Comisión de Crédito Público, a cambio de que aprobaran proyectos del gobierno en el Congreso.

“Espero por tanto la renuncia de un gran compañero y profesor honesto, el doctor Ricardo Bonilla, secretario de Hacienda de Bogotá Humana, que la dejó en su mejor momento financiero, y gran ministro de Hacienda, que sacó a Colombia de la recesión por el sobre endeudamiento que dejó Duque”.

Esta solicitud también se da el mismo día que se conoció que Bonilla señaló, en la ampliación de la denuncia por presuntas irregularidades en la empresa de energía URRAA, ante la Fiscalía, que hubo presiones indebidas para nombramientos por parte del presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa. . , y el hijo adoptivo de Petro, Nicolás Alcocer.

Según Petro, el sistema político actual favorece los “cupos indicativos” o “mermelada” , una práctica que considera contraria a los intereses del pueblo colombiano. Manifestó que estos acuerdos políticos favorecen a los poderosos en detrimento de las necesidades del país.

También hizo referencia a la “doble moral” que, según él, existe en el debate político. Aseguró que se le acusa de realizar prácticas que previamente había denunciado, como la intervención de comunicaciones y la corrupción dentro del aparato judicial. “Nos sindican de hacer lo que denunciamos y olvidan que guardaron en la prensa las denuncias nuestras”, señaló Petro en su intervención.

Intervención extranjera…

En su discurso, el presidente también criticó la injerencia de los actores internacionales en los asuntos internos del país. Según él, existen gobiernos extranjeros que ejercen presión sobre Colombia, desde imponer visados ​​hasta influir sobre la deuda pública. Además, destacó que el liderazgo de Colombia debería basarse en los ideales de Simón Bolívar, y no en las decisiones dictadas por actores externos. “Olvidaron la bandera y la lucha de Bolívar”, declaró Petro.

El presidente también señaló la manipulación política en torno a la ley de financiamiento que se encuentra pendiente de discusión en el Congreso. Según Petro, los opositores están utilizando el proyecto como una herramienta para generar un clima de crisis económica. Aseguró que el gobierno ha presentado un proyecto que beneficiaría a las empresas ya la clase media, pero que no ha sido discutido ni analizado por la prensa. “Si no da auxilios a nuestra comisión interparlamentaria de crédito público, le dicen al ministro, no hay créditos para pagar la deuda”, expresó el mandatario.

“Buscan el golpe”

Petro también dejó claro que su gobierno no está orientado a satisfacer los intereses de los sectores más ricos del país, sino a representar a la mayoría de los colombianos. En este sentido, criticó a aquellos que prefieren apoyar a los grandes empresarios y a los sectores más poderosos de la sociedad. “Buscan el golpe porque no quiero ser presidente de los ricos, sino de la gente sencilla que estudia y que trabaja” , sostuvo Petro, enfatizando que su administración está comprometida con las clases populares.

El mandatario hizo mención al presidente del Senado, Efraín Cepeda, y su apoyo a la gestión del exministro Alberto Carrasquilla. Acusó a Cepeda de alinearse con quienes en el pasado causaron daño a la economía del país, al tiempo que criticó su falta de voluntad para aumentar los impuestos a los sectores más ricos. “Cepeda, el presidente del Senado, antes que ponerle el impuesto a los más ricos de los ricos, le aterra más, que le suban los impuestos a las apuestas de suerte y azar”, comentó Petro.

La renuncia de Bonilla

Tras la solicitud, Bonilla anunció su renuncia. Expresó que decidió dar este paso para poder enfrentar un proceso legal en su calidad de ciudadano, despojado de su condición de funcionario público. Aseguró que esta decisión tenía como fin evitar que su situación personal afectara el desarrollo de la agenda pública del gobierno.

El ministro saliente también destacó que las dificultades que enfrentó durante su gestión dejaron importantes lecciones sobre el funcionamiento de la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público. En particular, mencionó que las “dilaciones permanentes en el otorgamiento de conceptos, no vinculantes”, provocan situaciones que pueden poner en aprietos a los funcionarios encargados de administrar las finanzas del país.

También defendió su gestión al frente del Ministerio de Hacienda, asegurando que las finanzas del país “gozan de buena salud” y que la estabilidad fiscal se ha mantenido a pesar de las dificultades tanto internas como externas. Afirmó, además, que no cometió delitos ni incurrió en actos de corrupción, y expresó su confianza en que su defensa demostrará su inocencia.