Domingo, 24 de noviembre de 2024 Suscríbase
Temas
Gobierno Gustavo Petro

Petro viajará el sábado por cuarta vez a Venezuela para hablar con Maduro de migración

También tratarán, según el mandatario, "un tema que va a ser crucial a partir de diciembre que es la sequía".

Presidencia

El presidente Gustavo Petro, viajará por cuarta vez este sábado a Venezuela para una reunión con su homólogo Nicolás Maduro en la cual abordarán la migración venezolana y una posible cumbre de países latinoamericanos para afrontar la sequía.

Así lo confirmó Petro durante una declaración a medios después de su intervención en la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, en sus siglas en inglés).

La reunión se dará el sábado y Petro quiere hablar de migración, un tema que trató hoy en un breve encuentro con el presidente estadounidense, Joe Biden, al que le trasladó la postura que ha repetido en varias ocasiones de que al levantar las sanciones económicas a Venezuela "la posibilidad de retorno es mucho más grande que en las actuales circunstancias".

También tratarán, según el mandatario, "un tema que va a ser crucial a partir de diciembre que es la sequía".

Petro quería que se celebrara en Venezuela una cumbre de jefes de Estado donde también estuvieran presentes Brasil, Panamá y Ecuador para abordar una mayor integración energética y la creación de redes de energías limpias que ayudara a paliar los efectos de la sequía y la crisis climática.

Sin embargo, el cambio de Gobierno en Ecuador, aseguró Petro, ha provocado que no se pueda "hacer la reunión hasta después del 30 de noviembre".

El mandatario colombiano ya hizo esa propuesta hace unas semanas tras la fugaz visita a Bogotá del presidente saliente de Ecuador, Guillermo Lasso, para lograr un acuerdo en el que Colombia enviará energía a Ecuador para paliar los cortes energéticos derivado de la sequía que estaba afectando a las principales hidroeléctricas de ese país.

Colombia y Ecuador tienen una interconexión eléctrica con capacidad de 400 kilovatios que ha permitido que en situaciones de crisis los países puedan enviarse energía mutuamente.

El país quiere conseguir lo mismo con Panamá -con la que comparte una densa frontera en el Darién por la que no pasa ni la carretera Panamericana- y con Venezuela, con la que ya hubo intentos en el pasado.