El presidente de la República, Gustavo Petro, le solicitó al recién liberado exjefe del paramilitarismo, Salvatore Mancuso, que compense a las numerosas víctimas que dejó en el país, no a través de dinero o bienes, sino mediante su labor como gestor de paz.
La propuesta fue presentada por el mandatario en Turbo, en la región del Urabá antioqueño, donde se reunió con miles de campesinos de bajos recursos, quienes han sido afectados por la violencia de grupos ilegales, incluyendo en el pasado a los paramilitares liderados por Mancuso, quienes sembraron dolor y muerte en diversas regiones.
“Salvatore Mancuso acaba de regresar a Colombia; está en libertad, o a punto de estar en libertad. Le he pedido que sea gestor de paz y que actúe en función de la paz; que ayude a construir ahora, ya no las trincheras, ya no los fusiles que van a disparar sobre la gente, sino la paz”, aseguró el mandatario.
Precisamente, la Procuraduría manifestó su objeción a la liberación provisional del exjefe paramilitar este sábado. Ante el magistrado del Tribunal de Justicia y Paz de Barranquilla, la procuradora delegada Diana Yolima Niño expresó que no existe claridad sobre la estructura armada organizada que representa Mancuso Gómez y cuál es el acto que lo designó como su representante.
La Procuraduría argumenta que en la solicitud para suspender las más de 30 medidas de aseguramiento que pesan sobre Mancuso no se ha detallado el proyecto que llevará a cabo como gestor de paz.
Además, no se han especificado los espacios temporales y territoriales de su actividad, y no se ha explicado por qué es necesaria su movilización por distintos puntos del territorio nacional, especialmente cuando en años anteriores otras personas han desempeñado funciones similares desde la cárcel.