La extensión propuesta se describe como "técnica" y tendría una duración limitada de algunas semanas. Esta prolongación del cese de hostilidades se mantendría bajo los mismos protocolos actuales y requeriría un acuerdo bilateral entre el gobierno y el ELN.
En respuesta a la propuesta, la delegación gubernamental expresó: "Somos conscientes de que se ha ido agotando el tiempo para preparar las condiciones necesarias para la nueva prórroga y por esta razón, coincidimos con ustedes en la opción de hacer una extensión técnica del cese al fuego que nos permita desarrollar el encuentro de las jefaturas de las delegaciones".
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La delegación del estado también ha manifestado su disposición para asistir a una reunión extraordinaria, propuesta por la ONU y la Iglesia, con el objetivo de resolver las diferencias entre las partes y retomar el proceso de paz. "Queremos expresarles nuestra disposición para llevar a cabo una reunión extraordinaria con la finalidad de retomar la mesa de diálogos y renovar el cese al fuego", indicaron los representantes del gobierno.
Adicionalmente, la delegación gubernamental agradeció a las Naciones Unidas y la Conferencia Episcopal por sus esfuerzos en este momento de incertidumbre que atraviesa la mesa de conversaciones. Esta extensión del cese al fuego busca proporcionar un espacio para que ambas partes puedan abordar sus diferencias y encontrar una solución a la crisis actual en el proceso de paz.