El caso de los presuntos sobrecostos en la compra de carrotanques para la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) continúa siendo investigado por las autoridades. En este contexto, el director de la entidad, Carlos Carrillo, acudió este martes a la Fiscalía para rendir declaración como testigo.
Desde la sede del ente acusador en Bogotá, Carrillo afirmó que, en su consideración, la supuesta corrupción no comenzó con su antecesor Olmedo López. Además, reaccionó al informe de la Contraloría que señala irregularidades en la contratación de los últimos cuatro años en la UNGRD, por un monto de 5 billones de pesos. "Es una cifra que preocupa mucho, sobre todo el tema que tiene que ver con la pandemia, donde se invirtieron unos recursos gigantescos", expresó Carrillo, manifestando su disposición para adelantar las investigaciones correspondientes con el órgano de control fiscal.
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La fiscal anticorrupción Andrea Muñoz, una de las encargadas de llevar el caso contra Olmedo López y Sneyder Pinilla, principales implicados en este escándalo, será la encargada de escuchar el testimonio de Carrillo. El caso también ha salpicado a congresistas y otros funcionarios del Estado.
Con respecto al hallazgo de la Contraloría sobre la concentración de la contratación en pocas empresas, Carrillo explicó que "solamente el caso de Impoamericana Roger SAS, que es una empresa paralela al señor Luket como se presentó en el caso de los carrotanques, parece ser la reina, y eso tiene que ver con la ruptura en la confianza con los empresarios serios". Esta situación ha generado preocupación en torno a la transparencia en los procesos de contratación.
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Además, Carrillo mencionó presuntos beneficios políticos derivados de la contratación en la UNGRD. "Al parecer hubo una evidente utilización política de las capacidades de la Unidad en las elecciones pasadas, y ni siquiera el señor Olmedo hacía campaña no solo por los candidatos de su propio partido político, sino por distintos candidatos, y esto nos lleva a pensar que toda la clase política está inmiscuida en este escándalo, y no me refiero a los individuos sino a todas las tendencias ideológicas", declaró el director.
En cuanto al proceso penal que se adelanta contra exfuncionarios de la UNGRD que buscan principios de oportunidad a cambio de delatar a otros implicados, Carrillo explicó que la entidad busca ser reconocida como víctima en el escándalo. "Porque estos señores pueden estar buscando un principio de oportunidad, pero la Unidad seguirá siendo víctima de su actuar criminal", afirmó. Finalmente, aclaró que no apoya el principio de oportunidad, ya que su papel es solicitar que se reconozca a la UNGRD como víctima.