El panorama político en Venezuela se torna cada vez más tenso a medida que se acercan las elecciones presidenciales programadas para el 28 de julio. La líder de la oposición, María Corina Machado, ha denunciado públicamente haber sido víctima de un intento de atentado en el estado Lara.
Machado utilizó sus redes sociales para informar que, tras su llegada al estado Lara, un grupo que ella identificó como "agentes del régimen" vandalizó los vehículos utilizados por su equipo para desplazarse entre regiones. En un video compartido por la líder opositora, se muestra una de las camionetas con la manguera de los frenos cortada, lo que podría haber resultado en un grave accidente.
La denuncia de Machado no se limita a este incidente aislado. Según sus declaraciones, los "agentes del régimen" habrían seguido a su comitiva desde que salieron del estado de Portuguesa. Este hecho se suma a reportes previos de intimidación en esa región, donde comerciantes denunciaron amenazas por parte de simpatizantes del chavismo. Específicamente, se habrían producido advertencias de cierre forzoso de negocios a aquellos que expresaran apoyo a Edmundo González, otro candidato opositor.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro ha realizado declaraciones que han intensificado la preocupación sobre el desarrollo pacífico de las elecciones y sus posibles consecuencias. Durante un evento de campaña en Caracas, Maduro expresó que si la población no desea "que Venezuela caiga en un baño de sangre, en una guerra civil fratricida", se debe garantizar su triunfo en las urnas el 28 de julio.
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Las advertencias de Maduro no se han limitado a una sola ocasión. En otros momentos de su campaña, el mandatario venezolano ha insinuado la posibilidad de una insurrección militar en caso de no ser reelecto. Además, ha hecho referencias a eventos históricos traumáticos como El Caracazo, un episodio de violentas protestas y represión ocurrido en 1989, que Hugo Chávez utilizó como plataforma para aumentar su popularidad hasta alcanzar la presidencia en 1999.
El discurso del presidente Maduro durante la campaña también ha incluido acusaciones contra la oposición. Ha reiterado en múltiples ocasiones que los opositores "pretenden borrar" al chavismo y ha afirmado que "tienen un plan de exterminio del pueblo".