El 10 de diciembre marca un año desde que Javier Milei asumió como presidente de Argentina. Mientras que sus seguidores destacan que la inflación ha caído del 25 por ciento mensual a menos del tres por ciento bajo su liderazgo, sus opositores señalan que la pobreza en Argentina ha aumentado considerablemente.
En primer lugar, sobre la inflación: es importante recordar que Argentina ha sufrido inflación de dos dígitos cada año desde 1945, con la excepción de los años 90, cuando el peso estaba vinculado al dólar.
Gracias a su programa de reformas, Milei ha logrado un superávit presupuestario por primera vez en 15 años, lo cual es poco menos que una sensación. Según un análisis del Instituto des Mariana, de España:
“En términos monetarios, Milei ha combinado dos tipos de mejoras: por un lado, la mejora cualitativa del balance del Banco Central, contaminado por muchos años en los que el déficit público se cubría imprimiendo dinero; por otro lado, la mejora cuantitativa de las condiciones del peso, con miras a estabilizar la base monetaria, lo que contribuirá a generar una relativa escasez de la moneda nacional, apreciando su valor frente al dólar. La brecha entre el tipo de cambio oficial y los precios reales del peso frente al dólar rondaba el 150 por ciento cuando Milei asumió el poder, pero para finales de 2024 es de aproximadamente tres por ciento, allanando el camino para la futura eliminación del control cambiario.”
¿Qué pasa con la tasa de pobreza? Milei heredó una tasa de pobreza del 45.2 por ciento, que brevemente superó el 50 por ciento. Sin embargo, recientemente ha disminuido y ahora está ligeramente por debajo de su nivel inicial. Esta tendencia, junto con una disminución del producto nacional bruto, era de esperarse, y lo había anticipado antes de que Milei asumiera el cargo.
De manera similar, durante las reformas de economía de mercado de Leszek Balcerowicz en Polonia entre 1990 y 1992 y de Margaret Thatcher en el Reino Unido a principios de los años 80, el producto nacional bruto inicialmente cayó, incluso más bruscamente que bajo Milei. El desempleo oculto se convirtió en desempleo abierto y muchas empresas fuertemente subsidiadas por el Estado a menudo no pudieron sobrevivir. Estos son procesos de ajuste normales en reformas radicales de economía de mercado, pero en Polonia y el Reino Unido fueron seguidos por un notable resurgimiento económico y una mejora masiva en los niveles de vida.
Es probable que el desarrollo sea similar en Argentina e incluso supere mis expectativas iniciales en los próximos dos años. Otro pasaje del análisis del Instituto des Mariana señala:
“La actividad productiva ya estaba en declive en 2023 y, como era de esperarse, las medidas de ajuste adoptadas por el nuevo gobierno liberal contribuyeron a un escenario inicial de contracción, manifestado en los dos primeros trimestres de 2024. Sin embargo, desde el tercer trimestre del año, la economía ha comenzado a mostrar signos de recuperación, alcanzando niveles de producción cercanos a los registrados antes de la llegada de Milei al poder, pero ahora con una mezcla monetaria y un ajuste fiscal. La mejora exhibida por la economía argentina tras el ajuste monetario y fiscal sugiere que el gobierno ha gestionado exitosamente este desafío.”
La desregulación ya está dando frutos, y esto es crucial para mantener la lealtad de los seguidores de Milei. Los esfuerzos del nuevo Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, liderado por Federico Sturzenegger, han sido particularmente destacados, incluyendo la abolición de las leyes de control de alquileres del país. Esto llevó a un aumento sustancial y rápido en la oferta de viviendas. Anteriormente, muchos propietarios habían dejado de alquilar, ya que dejó de ser financieramente viable debido a la combinación de control de alquileres e inflación. El alquiler mensual de un departamento promedio en la ciudad de Buenos Aires cayó un 30 por ciento en términos reales entre noviembre de 2023 y julio de 2024 como resultado de la abolición de estas leyes.
El éxito de Milei, como he enfatizado desde el principio, depende de su capacidad para superar este “periodo seco” inicial, que esencialmente se reduce a si los argentinos tienen suficiente paciencia y comprenden que los problemas acumulados durante décadas no pueden resolverse en un año.
Por el momento, parece que los argentinos lo reconocen, ya que la aprobación de Milei sigue rondando el 50 por ciento. Tiene muchos seguidores, especialmente entre los pobres. Sin embargo, a nivel internacional, los medios y políticos de izquierda son rápidos en culpar a Milei por el caos causado por sus predecesores peronistas. Y no solo los políticos de izquierda: en Alemania, cuando el líder del FDP de libre mercado, Christian Lindner, pidió recientemente “un poco más de Milei”, el líder de la CDU –y probablemente el próximo canciller de Alemania–, Friedrich Merz, respondió que estaba “horrorizado” por los comentarios de Lindner porque Milei estaba “arruinando” su país y pisoteando a las personas.
Los pobres en Argentina –que constituyen la mayoría de los seguidores de Milei– parecen entender su mensaje mejor que algunos supuestos políticos conservadores fuera del país.
Dr. Rainer Zitelmann, autor de “Las Diez Falacias Anticapitalistas” y “En Derfensa del Capitalismo”, publicados por Grupo Uniòn.