Hoy, se encuentra en vilo y a la espera de conocerse si el próximo destino futbolístico de Kylian Mbappé se vinculará con España, más puntualmente con el histórico Real Madrid.
Este francés de raza negra, de 1.72 m, que a sus 25 años de edad cuenta con grandes reconocimientos a nivel individual; como ser cuatro veces el jugador más valioso en la Ligue 1 de Francia; botín de oro por cinco veces consecutivas en la misma; y quien también diera su salto al olimpo del fútbol moderno por haber alzado una Copa del Mundo con tan solo 19 años, es actualmente el foco de hinchas, empresarios y de la prensa española.
En el fútbol de Europa no había reinado una ‘pantera’ desde aquellas décadas de los 70' y 80' cuando reinó Eusébio, conocido como 'La Pantera de Mozambique’. Hoy, vuelve a reinar una ‘pantera’, esta vez no portuguesa, sino francesa, conocida como, 'Donatello', 'Kiki', o simplemente Mbappé.
Para nadie es un secreto que desde hace décadas, LaLiga de España se ha visto envuelta en escándalos de exclusión por raza y que el problema todavía hoy no ha sido resuelto. Por ello, resulta paradójico que un 'negro' esté paralizando el mundo mediático del fútbol europeo y sea el foco en una liga racista.
No se puede olvidar que el gran 'Coloso de Buenaventura', Freddy Rincón, quién arribó al Real Madrid en 1995, fue víctima de racismo. El colombiano en varias entrevistas contó el trato que recibió por la misma hinchada madridista, señalando que "eso hizo que no pudiera jugar más tiempo o que no tuviera la oportunidad de jugar más en el Real Madrid".
El caso del bogotano Edwin Congo, también fue lamentable, pues en un partido de LaLiga española, cuando militaba en el Real Madrid, recibió insultos racistas de los hinchas del Celta de Vigo, por lo que la Federación Española de Fútbol tuvo que multar al equipo con 12.000 euros por actos discriminatorios.
Y cómo olvidar el acto racista contra el polémico Dani Alves en 2014. En aquel incidente en el estadio El Madrigal, cuando un aficionado del Villarreal le lanzó un banano a Alves, este sin pensarlo, no dudó en pelar el banano y darle un mordisco como respuesta al gesto discriminatorio, que luego levantó las voces de defensores de derechos humanos y organizaciones antirracistas.
Si hablamos del presente, han sido verdaderamente vergonzosos para el deporte, los últimos episodios racistas contra el gran jugador brasileño, Vinícius Júnior, quien ha denunciado varias veces actos discriminatorios del público español durante varios encuentros en LaLiga.
Entre los actos contra el brasileño, los más conocidos son los insultos racistas contra él, en el estadio Mestalla, por hinchas del Valencia, en mayo del 2023; además, ese mismo trato en octubre de 2023 en el Sánchez Pizjuán, donde hinchas del Sevilla llevando sus manos a las axilas como si fueran monos, le increparon (ignorantes, como si en este mundo, ellos pertenecieran a una raza superior en una institución que se erigiera por razas); y los hinchas del Atlético de Madrid, hace dos semanas, en la previa del partido de Champions contra el Inter de Milán, fueron grabados arengando: “Ale, ale, ale, Vinícius chimpancé”.
LaLiga española es racista, pero deja de serlo cuando le conviene.
¿La hinchada del Atlético puede aplaudir al francés, Thomas Lemar o al holandés, Memphis Dephay, o en su momento celebrar los goles de Jackson Martínez, jugadores de raza negra y, no mostrar por lo menos un poco de respeto por un jugador de otro equipo que comparte la misma raza de piel? Tal hecho paradójico es algo que se repite en varios equipos españoles.
Vinícius, el pasado 26 de marzo, rompió en llanto en rueda de prensa porque los actos en su contra se siguen presentando, y dijo que lleva años estudiando el tema del racismo: "Cada vez tengo menos ganas de jugar", confesó. "El racismo es normal en LaLiga. La competición cree que es normal, la Federación también y los adversarios lo alientan", agregó en otra oportunidad.
Hoy, paradójicamente La Primera División española, tan cuestionada por sus actos de segregación racial, tiene en la mira a Mbappé, un francés de raza negra, hijo de padres inmigrantes de origen camerunés y argelino, que tiene encantados a los dirigentes del club merengue, a la prensa y a los hinchas madridistas (estos últimos, cada vez que tienen la oportunidad, le piden al presidente del Real, Florentino Pérez, concretar su fichaje).
Y es que son muchos los beneficios que Mbappé le traería a LaLiga. No se puede desconocer que hoy el jugador está entre los mejores del mundo, y que de darse su traspaso, LaLiga volvería a contar con quizá tres de los cuatro mejores del fútbol actual: Vinícius, Bellingham, y el propio Mbappé (el noruego, Haaland, juega en la Liga Premier). El Madrid como marca se beneficiaría además, y se llevaría un jugador joven que sin duda le ayudaría a ser más grande en Europa (si es que algo de grandeza le falta). Y para LaLiga sería un bombazo publicitario, con un impacto económico incalculable.
A pesar de que el Real Madrid lleva varias temporadas detrás del jugador sin conseguir su objetivo de contratarlo, todo apunta a que el joven de orígenes africanos, se vestirá con la camiseta blanca el próximo 1 de julio (hasta una IA ya le puso el uniforme del Real Madrid). Según la prensa europea todo ya está listo entre Mbappé y el club merengue y solo se espera el anuncio del jugador.