Rusia ha solicitado este domingo a Ucrania la "detención inmediata y extradición" de todas las personas implicadas en atentados terroristas como el que el pasado 22 de marzo se cobró la vida de 144 personas en la sala de conciertos Crocus City Hall de Krasnogorsk, a las afueras de Moscú.
"El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha trasladado a las autoridades ucranianas las peticiones conforme al marco de la Convención Internacional para la Persecución de los Atentados Terroristas con Bomba y la Convención Internacional para la Persecución de la Financiación del Terrorismo para la detención y extradición inmediata de todas las personas implicadas en estos atentados terroristas", ha planteado Moscú.
El Gobierno ruso se refiere así al "sangriento atentado terrorista" del 22 de marzo que "conmocionó al mundo entero", "el primer atentado terrorista contra nuestro país de la época reciente". "Las investigaciones de las autoridades rusas competentes indican que las pistas de todos estos crímenes llevan a Ucrania", destaca.
El atentado ha sido reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico. Sin embargo, las autoridades rusas detuvieron a cuatro de los autores materiales del atentado cuando se dirigían a la frontera con Ucrania y sostienen que Kiev se disponía a acogerlos.
El comunicado del Ministerio de Exteriores ruso recuerda además "otros atentados terroristas bárbaros" con explosivos como el que se cobró en 2022 la vida de la hija del ideólogo ultranacionalista Alexander Duguin, Daria Dugina --que Moscú considera "periodista"--, o el de 2023 contra el del bloguero ucraniano prorruso Maxim Fomin, conocido como 'Vladlen Tatarski', quien colaboraba habitualmente con las Fuerzas Armadas rusas.
Moscú menciona también el atentado en el que resultó gravemente herido el escritor y paramilitar ruso Zajar Prilepin en 2023 o la muerte de cinco personas por la explosión del Puente de Crimea en 2022. "Las incursiones de la organización terrorista Cuerpo Ruso de Voluntarios (RDK) han causado muerte y mutilación de civiles, incluidos niños", señala.
Por todo ello solicitan la detención del director del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), Vasil Maliuk, "quien reconoció cínicamente el 25 de marzo que Ucrania organizó el ataque con bomba del Puente de Crimea de octubre de 2022 y reveló detalles de la organización de otros atentados terroristas en la Federación Rusa".
"La lucha contra el terrorismo internacional es responsabilidad de cada Estado. Rusia exige al régimen de Kiev que cese de inmediato cualquier apoyo a actividades terroristas, entregue a los responsables y compense el daño causado a las víctimas", plantea.
Asimismo, Moscú resalta que "la violación de sus obligaciones según las convenciones antiterroristas tendrán implicaciones para su responsabilidad legal a nivel internacional".