El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó este martes la creación de una división de la petrolera estatal Pdvsa para, "de inmediato", empezar a "conceder licencias operativas para la exploración y explotación de petróleo, gas y minas" en el territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados en disputa con Guyana.
El mandatario pidió también crear una división de la CVG -un conglomerado de empresas públicas de recursos mineros, forestales y eléctricos- para desarrollar proyectos en el área disputada, en la que Venezuela no ejerce control desde 1899.
Frente a gobernadores, alcaldes, ministros, diplomáticos y otros funcionarios, Maduro propuso establecer una norma que prohíba la contratación de empresas que operen o colaboren en las concesiones dadas por Guyana en el mar que Venezuela considera "pendiente por delimitar".
Estos anuncios se producen dos días después de que el país celebrara un referendo unilateral en el que los ciudadanos respaldaron por abrumadora mayoría "oponerse por todos los medios" a las concesiones otorgadas por Guyana en esta zona en los últimos años, lo que avivado el pleito.
Maduro no estimó el tiempo que tardará en concretarse la primera concesión para esta área, que Venezuela aprobó incorporar a su mapa nacional, lo que significa despojar a Guyana de dos terceras partes de su geografía.
La controversia por este territorio data del siglo XIX, pero desde 2018 ha cobrado vigor en vista de la admisión del caso por parte de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que ha pedido a Venezuela no completar acciones que alteren la dinámica actual sobre el área, administrada por Guyana.
Sin embargo, Maduro rechaza la mediación de la CIJ en este asunto, un alegato que también se vio reforzado con el referendo, en el que los venezolanos acordaron no reconocer la jurisdicción del tribunal internacional que, de cualquier modo, emitirá una decisión vinculante para las dos naciones en los meses por venir. EFE