Un alto cargo del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha subrayado este martes que "los principales puntos" de la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en apoyo al plan de alto el fuego presentado por el presidente estadounidense, Joe Biden, son "positivos" y ha recalcado que la misma no podrá ser aplicada "si la ocupación no la respalda".
"La resolución del Consejo de Seguridad (de la ONU), pese a sus carencias, apoya un cese permanente de los combates y la retirada de la ocupación de la Franja de Gaza", ha dicho Osama Hamdan. "La resolución contiene puntos que no aceptamos, pero los principales son positivos", ha agregado, según ha informado el diario palestino 'Filastin', vinculado al grupo islamista.
Así, ha sostenido que "el movimiento ha dado una respuesta positiva a todas las ideas propuestas para un alto el fuego", antes de reiterar la petición de Hamás para "un alto el fuego permanente" en la Franja de Gaza. "Estamos dispuestos a un acuerdo justo para el intercambio de prisioneros", ha puntualizado Hamdan, quien ha dicho que el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, "es uno de los obstáculos que impiden un acuerdo".
"Sólo actúa en línea con lo que quiere Israel", ha criticado Hamdan, quien ha apuntado que "el problema deriva de la posición estadounidense, pero más concretamente de la de Blinken". "Todas las acciones de obstrucción han sido llevadas a cabo por Israel con aprobación estadounidense", ha explicado, antes de abundar en que "los intentos de presionar a los mediadores no cambiarán la posición de Hamás".
Hamás ya afirmó a última hora del lunes que acogía positivamente la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU y pidió negociar con Israel los principios recogidos en el texto. "Confirmamos nuestra disposición a trabajar con nuestros hermanos, los interlocutores, para negociar indirectamente cómo aplicar estos principios que coinciden con las demandas de nuestro pueblo y de la resistencia", dijo.
La resolución fue aprobada por el Consejo de Seguridad por 14 votos favorables y la abstención de Rusia. La propuesta incluye un "alto el fuego total y completo", la liberación de los rehenes que retienen las milicias palestinas, la entrega de los cadáveres de rehenes y la liberación de presos palestinos.
El plan está dividido en tres fases, en las cuales la primera plantea el intercambio de rehenes por presos y un alto el fuego a corto plazo. En la segunda se prevé un "cese permanente de las hostilidades" y la retirada total de las fuerzas militares israelíes de Gaza, según el texto de la resolución, presentada por Estados Unidos. La tercera y última fase incluye un plan de reconstrucción de la Franja de Gaza de varios años de duración.