El informe publicado por el Departamento de Estado de Estados Unidos confirmó que Cuba continuará en la lista de países patrocinadores del terrorismo durante el 2024. La designación conlleva sanciones económicas, restricciones comerciales y limitaciones en la cooperación bilateral.
Cuba comparte esta clasificación con Corea del Norte, Irán y Siria. Según Washington, la inclusión responde al supuesto apoyo del Gobierno cubano a actos de terrorismo internacional, incluyendo el refugio otorgado a miembros de grupos como el ELN y a prófugos de la justicia estadounidense.
El secretario de Estado, Antony Blinken, indicó en una audiencia ante el Congreso que no se prevén cambios en esta política antes del final del mandato del presidente Joe Biden en enero de 2025. La medida había sido adoptada inicialmente en 2021 por la administración de Donald Trump.
Estados Unidos justificó la decisión señalando que Cuba no ha respondido formalmente a solicitudes de extradición de líderes del ELN requeridos por Colombia. Además, acusó al Gobierno cubano de brindar refugio a personas buscadas por cargos de violencia política en Estados Unidos.
La designación de patrocinador del terrorismo establece prohibiciones en la venta de armas, mayores controles a las exportaciones, restricciones en la ayuda exterior y sanciones adicionales que afectan a la economía cubana. Estas medidas han sido cuestionadas por el Gobierno cubano, que las considera injustificadas.
Cuba había sido retirada de esta lista en 2015 durante la administración de Barack Obama, en un período de acercamiento entre ambos países. Sin embargo, la política se revirtió durante el mandato de Trump, que implementó nuevas sanciones y frenó los avances diplomáticos.