Aboga en una conversación telefónica con Lavrov por «continuar la senda diplomática».
EUROPA PRESS
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, volará este martes rumbo a Ucrania para reunirse con las principales autoridades locales y trasladar ‘in situ’ los planes del Gobierno de Joe Biden «si Rusia decide elevar la tensión» con nuevos movimientos militares.
Blinken, que este martes recibe precisamente en Washington al ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, ha mantenido en estos últimos días contactos con «aliados europeos» sobre la forma de responder a las potenciales amenazas derivada de Rusia.
Washington, que aspira a un frente «unido», insta a Moscú a «elegir la diplomacia y la desescalada» en aras de «la seguridad y la estabilidad», pero al mismo tiempo Blinken tiene previsto trasladar a la Embajada estadounidense en Kiev los trabajos frente a posibles «contingencias», según un comunicado.
El jefe de la diplomacia norteamericana tiene previsto reunirse este miércoles con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y con el ministro de Exteriores, Dimitri Kuleba, mientras que un día más tarde viajará a Berlín para ver a su homóloga alemana, Annalena Baerbock. También aprovechará esta escala para hablar con dirigentes de Reino Unido y Francia.
«El viaje y las consultas (de Blinken) forman parte de los trabajos diplomáticos para rebajar la tensión causada por el refuerzo militar de Rusia y la agresión continuada contra Ucrania», reza la nota del Departamento de Estado, que revela de nuevo la preocupación norteamericana sobre una posible invasión.
Biden ya expresó personalmente estas preocupaciones al presidente ruso, Vladimir Putin, al que ha amenazado con medidas sin precedentes si hay algún tipo de violación de la soberanía. Moscú niega las acusaciones y sostiene en cambio que es el acercamiento de Kiev a la OTAN el que supone una amenaza.
CONVERSACIÓN CON LAVROV
Antes de su viaje a Ucrania, Blinken mantuvo una conversación telefónica con el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ante quien defendió «la importancia de continuar la senda diplomática». El secretario de Estado norteamericano ha reiterado ante su homólogo que el despliegue militar cerca de Ucrania es «muy preocupante» y ha defendido la «integridad territorial» de Ucrania.
Por su parte, el ministro ruso le ha instado a no hacerse eco de las «especulaciones» sobre esa presunta invasión y, en cambio, obligar a Kiev a aplicar los compromisos recogidos en los Acuerdos de Minsk para pacificar el este de Ucrania, según un comunicado de su departamento.