El principal puerto yemení de Al Hodeida, controlado por los rebeldes hutíes, ha sufrido daños por valor de más de 20 millones de dólares como consecuencia de los ataques aéreos israelíes del pasado 20 de julio, informó un responsable de la autoridad portuaria hutí.
El subdirector de la Yemen Red Sea Ports Corporation, Nasr al Nusairi, dijo en las últimas horas durante una visita al puerto que la cifra de pérdidas era una estimación inicial de los daños causados por los ataques que tuvieron como objetivo una serie de infraestructuras portuarias críticas, como grúas, muelles, edificios e instalaciones petrolíferas, y que causaron 9 muertos y más de 80 heridos.
Nusairi -designado por los hutíes- dijo que un comité formado para evaluar los daños en la terminal de contenedores todavía estaba estimando el alcance total de la destrucción, en concreto en las grúas y el remolcador, mientras que la Yemen Oil Company todavía estaba evaluando los daños en las instalaciones petroleras del puerto.
"Las instalaciones petroleras están siendo evaluadas por otro comité 'ad hoc', y los resultados se anunciarán una vez finalizada la evaluación", añadió.
En la terminal de contenedores, cayeron restos de metal y cables de las dos únicas grúas pórtico, cuyo armario de control y polipastos quedaron destruidos por los ataques.
Los funcionarios hutíes negaron a los periodistas el acceso a los tanques de almacenamiento de petróleo, pero un trabajador del puerto dijo a EFE que hasta 30 tanques fueron destruidos o dañados por los ataques.
El responsable, que pidió no ser identificado, dijo que el puerto no podrá recibir cargamentos de combustible, por lo que el crudo se descargará en instalaciones de almacenamiento de reserva en el puerto de Ras Issa, al norte de Al Hodeida.
A pesar de los daños, el puerto ha conseguido reanudar sus operaciones mucho antes de lo esperado.
"El puerto funciona ahora a pleno rendimiento y estamos preparados para más, aunque el enemigo había apostado por que el puerto dejaría de funcionar y tardaría no menos de un año en volver a estar activo", declaró orgulloso Al Nusairi.
A pesar de sus comentarios, los daños infligidos a la infraestructura del puerto por los ataques aéreos han supuesto un golpe significativo al Yemen, lo que amenaza con agravar aún más la ya grave crisis humanitaria en el Yemen, sumido en una guerra civil desde 2014.
Los ataques israelíes se dieron después de que los hutíes reivindicaran un ataque con dron en Tel Aviv, que provocó la muerte de un civil israelí.
Los hutíes llevan desde el pasado noviembre atacando barcos vinculados a Israel en el mar Rojo y Arábigo en apoyo al pueblo palestino.
EFE