Por Laura Tobón/ Presentadora y empresaria colombiana/ @laura_tobon
Sus calles empedradas, su historia y su diversidad en la gastronomía son algunos de los atractivos de este mágico destino.
Antes de la pandemia, Villa de Leyva recibía la visita de hasta 30.000 personas en alguna de sus fiestas o 6.000 personas en un solo fin de semana. Este municipio de Boyacá ha sido un destino predilecto de capitalinos y turistas extranjeros. Es famoso por su historia, por sus paisajes, su cultura y por conservar la belleza de su arquitectura colonial. También es conocida por los diversos planes ecológicos y turísticos que ofrece, y por supuesto, por su inmensa Plaza Mayor, considerada una de las más grandes de Latinoamérica, la cual fue declarada como Monumento Nacional en 1954.
En este lugar a dos horas de Bogotá, se pueden encontrar paisajes que van desde la zona de páramo, hasta las arenas desérticas y es ideal para encontrarse con la historia, la ciencia, el arte, la cultura, la naturaleza y una gastronomía exclusiva que fusiona diferentes sabores de todo el mundo.
Aunque debido a las restricciones de circulación y de viajes que ha implicado el Covid-19 la cifra de turistas ha disminuido, Villa de Leyva siempre tiene las puertas abiertas para recibir a todos los visitantes. Los hogareños y empresarios se han preparado después de varios meses de cierre para garantizarle a quienes visiten los diferentes museos, restaurantes y sitios de interés, una experiencia segura y agradable, bajo estrictas medidas de bioseguridad.
¿Qué hacer?
Lo más importante es estar preparado para caminar y recorrer sus calles empedradas de principio a fin y disfrutar de la arquitectura donde predomina lo colonial; la ciencia, la historia, la prehistoria y el arte. En medio del recorrido por Villa de Leyva hay museos que ya tienen abiertas sus puertas. Actualmente se puede ingresar a los museos de pintura, de escultura y de historia nacional:
- Casa Museo Antonio Ricaurte
- Casa Museo Antonio Nariño
- Museo de Arte Religioso El Carmen
- Casa Museo Luis Alberto Acuña
Igualmente se puede visitar el tradicional Museo del Chocolate, un lugar experiencial en el que se puede probar diferentes productos elaborados a base de este ingrediente, como la cerveza de chocolate o el té de cacao. El museo también cuenta con una boutique, hotel, spa y restaurante.
Uno de los lugares sagrados más famosos de Colombia es el Templo Parroquial de Nuestra Señora del Rosario, construido en 1604 y que se encuentra en la Plaza Mayor. Su diseño está basado en una arquitectura del barroco colonial y tiene en su interior retablos tallados en madera recubiertos de oro.
Al salir del casco histórico los visitantes encuentran el Museo Prehistórico, el Museo El Fósil y el Museo Paleontológico, que también ofrecen atención al público y que cuentan con esculturas de dinosaurios y fósiles que han sido encontrados en la zona por los equipos de arqueólogos que estudian desde hace años los secretos de este bello lugar. En la parte desértica de Villa de Leyva se encuentran los Pozos Azules, unos pozos artificiales que tienen diferentes tonalidades de azul y que cambian su matiz dependiendo del clima.
Dar un paseo por los viñedos, es otro de los planes recomendados para esta época, ya que cumplen con todos los protocolos de bioseguridad. Durante esta actividad se podrá disfrutar de un recorrido que va desde 40 minutos hasta una hora y media y poder visitar los cultivos de uva, conocer en detalle el proceso de producción del vino, de ahí pasar a la cava y degustar los vinos propios de la región.