A medida que el año 2023 se acerca a su fin, la atención de millones de trabajadores en Colombia se centra en la decisión pendiente sobre el aumento del salario mínimo. El Gobierno, junto con sindicatos y gremios empresariales, retoma las conversaciones para definir el ajuste salarial que afectará a más de dos millones de personas en el país.
El aumento del salario mínimo no solo impacta directamente las ganancias de los trabajadores, sino que también influye en diversos aspectos de la economía, como los arriendos, multas de tránsito y la comercialización de viviendas nuevas. Algunas constructoras prefieren fijar los precios de las viviendas en salarios en lugar de pesos, como estrategia para enfrentar la inflación y la situación económica actual.
A lo largo de noviembre, se han presentado diversas propuestas provenientes de diferentes sectores. Los sindicatos, en particular, han propuesto un aumento del 18%, un 2% más que el año pasado, cuando se estableció un incremento del 16%, elevando el salario mínimo a $1.160.000. Sin embargo, los empresarios consideran esta propuesta significativamente alta y abogan por un aumento que se mantenga cercano a la tasa de inflación.
En la mañana de este viernes, la mesa de concertación de políticas laborales y salariales ha convocado a una nueva reunión con representantes de Fenalco, la Sociedad de Agricultores Colombianos, entre otros actores clave. La reunión, que comenzó a las 11:30 a. m., busca alcanzar un acuerdo que satisfaga a todas las partes involucradas.
Se espera que en los próximos días se revele la cifra definitiva del aumento del salario mínimo, ya que la mesa de concertación tiene plazo hasta el 30 de diciembre para llegar a un acuerdo. No obstante, las partes involucradas expresan la intención de alcanzar un consenso de manera temprana, sin esperar hasta la fecha límite.