El incremento inflacionario global está generando preocupaciones en Colombia, especialmente en el ámbito de los costos médicos, que podrían verse agravados por la incertidumbre asociada a la próxima reforma de salud.
Según un informe de la firma AON, se espera que los costos médicos en Colombia aumenten un 12,4% durante el año 2024. Esta estimación, basada en un índice de inflación del 4,2% en 2023 y del 5,4% en 2024, representa un aumento significativo con respecto al incremento del 7,2% registrado en 2023.
La incertidumbre generada por la reforma de salud, que iniciará su debate en el Senado este mes, añade presión al panorama de costos médicos. AON destacó que el aumento proyectado del 72% en la tasa general de este rubro para 2024 refleja los desafíos derivados de la inflación, avances tecnológicos en el ámbito médico y cambios en los patrones de uso de los planes de salud.
Colombia no está sola en enfrentar este desafío, ya que se proyecta que América Latina y el Caribe experimentarán un aumento del 11,7% en los costos médicos en 2024, en comparación con el aumento mundial del 10,1%.
El centro de pensamiento Así Vamos en Salud subraya la necesidad de nuevas fuentes de financiación para garantizar la sostenibilidad del sistema de salud colombiano. El desfinanciamiento actual, la insuficiencia en la definición de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) y los retrasos en los pagos a las EPS son desafíos que deben abordarse.
El vicepresidente técnico de Acemi, Mario Cruz, señaló que el aumento de costos afectaría tanto al plan básico como a los planes voluntarios, poniendo presión adicional en las finanzas públicas y el sistema de salud. Esto podría resultar en un encarecimiento de las medicinas prepagadas, pólizas y planes complementarios, afectando a las familias y empresas.