El FC Barcelona sufrió una dolorosa derrota este martes frente al Paris Saint-Germain (1-4) en el Estadi Olímpic Lluís Companys, lo que significó su eliminación de la Liga de Campeones en los cuartos de final, a pesar de haber ganado 2-3 en el partido de ida. El encuentro estuvo marcado por la temprana expulsión de Ronald Araujo, lo que dio ventaja al PSG para buscar la remontada ante un Barça desorientado y fatigado.
El gol inicial de Raphinha dio una falsa esperanza al Barcelona, pero la expulsión de Araujo en el minuto 29 cambió el rumbo del partido. A partir de ese momento, el equipo catalán perdió su identidad y se vio superado por el PSG, convirtiéndose en un conjunto desorganizado y agotado físicamente, por no decir que fue más de lo mismo de los últimos años. A pesar de ello, el Barcelona tuvo oportunidades para igualar el marcador y forzar la prórroga, pero no logró concretarlas.
Con un remate al larguero de Gündogan y una intervención salvadora de Donnarumma ante un disparo de Lewandowski, el Barcelona estuvo cerca de acortar distancias, pero fue Mbappé quien sentenció el partido con el cuarto gol para el PSG. ¿Algo podía salir peor? Sí. Que João Cancelo cometiera un penalti innecesario a Ousmane Dembélé, cuando este salía del área. Desde la expulsión de Araujo, el Barcelona no logró imponer su juego y se vio superado por un PSG determinado a remontar la eliminatoria.
"Lo hemos intentado, hemos luchado para pasar a semifinales, pero no pudo ser hoy. Es un golpe fuerte porque estábamos convencidos de que podíamos pasar, pero no queda otra que levantarnos e intentarlo otra vez el año que viene", señaló De Jong en declaraciones a Movistar+ tras el encuentro.
A pesar de arrancar ganando, el Barcelona se vio desbordado por el PSG, que dominó el partido y encontró el camino hacia la victoria. La expulsión, fue un punto de inflexión que marcó el destino del Barcelona en la Liga de Campeones, poniendo fin a su sueño de llegar a semifinales. Ahora, el equipo catalán deberá centrarse en otras competiciones y en mejorar su rendimiento en el futuro.