El Aston Villa que dirige el español Unai Emery deberá esperar para certificar su clasificación a la Liga de Campeones tras empatar este lunes 3-3 con el Liverpool gracias a un doblete en los minutos finales de Jhon Jader Durán que hizo explotar a las tribunas en un trepidante encuentro.
Tanto fue la alegría que en uno de los palcos estaba el actor Tom Hanks que celebró a rabiar el tercer gol del colombiano.
Sabedor de que este era su penúltimo partido al frente de los 'reds', el último fuera de casa, los pupilos del técnico alemán Jurgen Klopp parecieron dispuestos a recordar el eléctrico fútbol que permitió al Liverpool reinar, no hace mucho, tanto en Inglaterra como en Europa.
Puro 'rock and roll' que permitió a los visitantes adelantarseantes de cumplirse los dos minutos de juego con un gol en propia meta del portero argentino Emiliano 'Dibu' Martínez, que acabó introduciendo en su portería un balón tocado por un defensa tras un remate de Harvey Elliot.
Un gol que pareció sobreexcitar todavía más si cabe a un Liverpool que encontró en el flanco izquierdo de la defensa del Aston Villa ocupado por el francés Lucas Digne el escenario perfecto para las correrías de Mohamed Salah.
De hecho, el delantero egipcio estuvo a punto hasta en dos ocasiones de doblar la renta visitante en los siguientes compases, pero si en el minuto 4 el remate se Salah se fue ligeramente desviado, en el 11 la combinación entre el africano, el colombiano Luis Diaz y el neerlandés Cody Gakpo acabó en el poste.
Ocasiones y más ocasiones a las que no tardó en responder el conjunto local que de la mano del español Unai Emery, que pese a no gastar la misma fama de preparador ofensivo que el alemán, ha convertido a este Aston Villa en el equipo más goleador de los "villanos" en los últimos cuarenta y siete años.
Un carácter ofensivo que se justifica en la verticalidad y velocidad de jugadores como el francés Moussa Diaby o el jamaicano Leon Bailey y, sobre todo, de un Ollie Watkins que demostró a los 12 minutos que no sólo es un voraz goleador, sino también un sensacional asistente.
Tal y como quedó claro a los doce minutos en una jugada en la que tras desbordar a su par y llegar a línea de fondo aguardó a la llegada de Youri Tielemams para que el centrocampista belga firmase el 1-1.
Un gol que dio inicio a un constante ir y venir de un área a otra del que salio victorioso el Liverpool gracias a su mayor pegada, gracias a jugadores como el atacante neerlandés Cody Gakpo que firmó a los 23 minutos el 1-2 al enviar a las redes un centro de Joe Gomez tras una jugada iniciada, como no, por Salah en la banda derecha.
Tanto al que pudo responder el Aston Villa trece minutos más tarde en una eléctrica jugada de Leon Bailey, que vio cómo el central brasileño Diego Carlos completamente solo en boca de gol no acertó a enviar el balón el interior de la portería.
Quien no falló fue el joven defensa del Liverpool Jareli Quansah que a los tres minutos de la segunda mitad estableció el 1-3 para los de Jurgen Klopp al cabecear una falta botada por Harvey Elliot.
Un marcador que obligó al Aston Villa a apostar el todo por el todo y lanzarse a un ataque continuo en busca del triunfo que necesitaba para sellar su billete para la próxima edición de la Liga de Campeones sin esperar a la última jornada.
Ofensiva total que pareció dar sus frutos a los de Emery, que vieron cómo en el 52 Ollie Watkins anotaba el 2-3 a pase del jamaicano Leon Bailey.
Un gol que no subió al marcador al comprobarse en las imágenes de vídeo que el atacante antillano se encontraba en posición antirreglamentaria, tal y como ocurrió siete minutos después, en el 59, con el gol de Elliot Harvey para el Liverpool.
Circunstancia que no aplacó la voracidad de ninguno de los dos contendientes, especialmente del Aston Villa, que tras rozar el gol a los 69 minutos en un remate del italiano Nicolo Zaniolo, que acabó el partido lesionado, encontró su premio en el 85 con el tanto (2-3) del colombiano Jhon Durán.
No sería el único tanto de atacante 'cafetero' que en el 88 llevó a la locura a Villa Park con un gol (3-3) a pase de Diaby que abrió al Aston Villa la posibilidad de una remontada que los de Unai Emery a punto estuvieron de lograr en el tiempo de prolongación de Moussa Diaby que obligó a lucirse el portero del Liverpool.
Una parada que obligará al conjunto de Birmingham a esperar una derrota del Totenham, que se medirá este martes con el Manchester City, o a ganar en la última jornada al Crystal Palace para regresar a la Liga de Campeones 41 años después.