La NFL, que regula el fútbol americano, es la más poderosa de las federaciones de deportes a nivel mundial. Percibe al año ingresos que superan los 18 mil millones de dólares. Las cifras que se mueven en la bolsa para adquirir las principales estrellas de este deporte, sobrepasan sin problema alguno sueldos anuales de más 60 millones de dólares. Todo lo que se habla en el fútbol americano es de mega cifras.
Los expertos señalan que es un deporte que no tiene vencedores ni vencidos. Sino “sobrevivientes”. Los jugadores son definidos como moles con casco que chocan entre sí y la posibilidad de sufrir una lesión que lo aleje de este deporte es muy alta e incluso, la propia muerte.
De los ingresos, la NFL destina cerca de 300 millones de dólares para atender a 3.200 jugadores discapacitados. La cobertura médica para los jugadores del fútbol americano es de un tiempo muy corto. Tan solo cinco años, porque es considerado un deporte altamente peligroso. Ha dejado a jugadores con demencia precoz, otros en sillas de ruedas y unos más con dolores físicos que nunca se logran calmar. Los deportistas que practican este deporte son más propensos a morir de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).
Sin embargo, es el deporte más venerado por los estadounidenses y el Super Bowl tiene una de las mayores audiencias televisivas a nivel mundial. Cadenas como ESPN pagan 15.000 millones de dólares a la NFL para emitir su mítico programa Monday Night Football, que nació en 1970.
La gran fiesta del deporte de Estados Unidos tiene lugar cada año en febrero y enfrenta a los dos mejores equipos de la temporada regular que define el campeón de la NFL. Las cifras que mueve el Super Bowl son ultra millonarias.
En la edición de 2023, hubo récord de televidentes, 114 millones de personas en el planeta vieron el partido. Un año atrás —2022— la cifra estaba en 99 millones de telespectadores.
Las grandes empresas gastaron 485 millones de dólares para hacer parte de los anunciantes del Super Bowl 2023. El promedio por cada espacio publicitario ascendió a 6,5 millones de dólares.
Las apuestas en Las Vegas rompieron también récord, ascendió a 180 millones de dólares. El mayor número de asistentes a un partido de la final está en 103.985, ocurrió en 1980 en California en el estadio Rose Bowl.
En 2023, cada uno de los jugadores del equipo ganador, se llevó un premio de 164 mil dólares, mientras los perdedores la bolsa fue de 89 mil dólares.
Para el día del Super Bowl, se venden 50 millones de latas y botellas de cerveza. El impacto económico para cada ciudad que celebra la gran final del fútbol americano, se estima en 400 millones de dólares que tiene como principal rubro los hoteles, restaurantes y bares.
Pero no todo es fútbol americano en el gran día deportivo de los Estados Unidos. El otro mito es el show de medio tiempo. Por la pista de juego han desfilado los más grandes artistas del momento, entre ellos Shakira. Su elección es un gran secreto que se conoce en su momento para darle más espectacularidad.
“El Super Bowl LVIII se jugará en el Allegiant Stadium de Las Vegas, el domingo 11 de febrero”
Son 13 minutos, para saltar a la fama o recibir las más crudas y feroces críticas. Los artistas no cobran un solo peso por el espectáculo. Pero todos quieren ser los elegidos.
Para este 2024, Apple Music tendrá en el escenario a Usher, el talentoso cantante de R&B, dance y pop, considerado showman por excelencia.
El domingo 11 de febrero la cita es en el Allegiant Stadium de Las Vegas, que por primera vez celebra un Super Bowl. Una combinación de excentricidad y deporte. Ese que es considerado el deporte “para machos”.