La Empresa Metro de Bogotá y la Banca Multilateral resolvieron un conflicto de interés que surgió en el proceso de contratación para la construcción de la Segunda Línea del Metro de Bogotá. El conflicto se identificó luego de una protesta presentada por el consorcio APCA 4, que señalaba posibles irregularidades entre tres de los precalificados.
Tras revisar la protesta, la empresa y la Banca Multilateral concluyeron que existía un conflicto de interés entre los consorcios APCA 1 y APCA 2, debido a la relación entre la empresa China Communications Construction Company Limited (CCCC) y dos de las firmas involucradas en el proceso. CCCC controla directamente a CHEC (APCA 2) y tiene participación accionaria en Mota-Engil SGPS S.A (APCA 1), lo que les permite influir en ambas ofertas.
Ante esta situación, la EMB ofreció a los consorcios involucrados la oportunidad de resolver el conflicto. Sin embargo, las respuestas proporcionadas por las firmas no fueron satisfactorias para las autoridades, lo que llevó a la descalificación de ambas ofertas. La Banca Multilateral respaldó la decisión, que se tomó de acuerdo con las normativas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
A pesar de esta descalificación, la EMB aseguró que la licitación continuará conforme al cronograma establecido. Las ofertas se recibirán hasta el 20 de diciembre de este año, y se espera que la adjudicación se realice el 24 de abril de 2025, sin que este incidente afecte los plazos del proyecto.