The Midnight Club (Netflix)
Del reconocido director de terror y suspenso Mike Flanagan, creador de la exitosa The Haunting of Hill House, Midnight Mass y películas como Oculus y la secuela de El Resplandor: Dr. Sleep, se estrena este 7 de octubre en la plataforma de Netflix “El Club de la Medianoche”, una serie que narra las desventuras de un grupo de jóvenes con enfermedades terminales que habitan una gigantesca mansión que se convertirá en el escenario de una experiencia espectral, un pacto paranormal en donde cada vez que alguno de ellos muera, deberá volver de la muerte para comunicarse con todos los demás. Este aterrador pacto se desarrolla al tiempo que el grupo de jóvenes se reúne a media noche en un solitario salón de la mansión para contarse historias de miedo, que a su vez sirven como una metáfora de sus propios sufrimientos.
Smile (proyectandose en cine)
Para los que prefieren salir de la comodidad de su hogar y vivir la clásica experiencia de una sala de cine llega “Sonríe”, una experiencia perturbadora que sigue a la doctora Rose Cotter, quien es testigo de un brutal suicidio de uno de sus pacientes, lo que desencadenará un descenso a las profundidades del delirio psicótico y paranormal. “Smile” es una clásica película de terror que se siente tensionante, angustiante y que incomoda visual tanto como narrativamente, convirtiendo una premisa sencilla en apariencia, en un cuadro aterrador en su máxima expresión potenciado por una edición de sonido sumamente efectiva que aprovecha cada centavo para explotar la creatividad del director y ofrecer una película digna de las mejores del género, con una apariencia modesta pero sumamente perturbadora.
Fresh (Disney+, Star+)
Esta película es un entretenimiento sólido de fin de semana, una historia de terror que se transforma en una comedia negra que a su vez recorre ciertos tropos de las relaciones humanas mediadas por la confianza que se deposita en los extraños encantadores. Aquí, Sebastian Stan (soldado del invierno del universo Marvel), interpreta a un carismático y perturbador personaje que construye el arquetipo clásico del psicópata americano, no sin antes mostrar unos cuantos matices que lo convierten en un particular y por momentos cómico anfitrión de una casa del horror que recuerda a películas como “Hostal” (2005) o “American Psycho” (2000), sin la seriedad de las anteriores. Daisy Edgar-Jones, hace las veces de ingenua damisela que recurre a los más oscuros instintos para librar una batalla laberíntica de astucia y juegos seductores en una historia que no se toma en serio así misma, pero que cumple con un entretenimiento ligero y muy bien dirigido que mantiene fresco un género que puede sucumbir en ocasiones ante la seriedad del drama de terror sangriento.