Multiverso: Imagen hecha con Inteligencia Artificial.
En 2023, ocurrió lo impensado. ¿Quién se imaginó que la derecha fuera la ganadora de los comicios para dirigir la nueva constituyente que fue promovida por la izquierda o que en España la izquierda fuera derrotada por el PP en las elecciones autonómicas?, y lo más importante, ¿se repetirá este fenómeno en Colombia con la oposición?.
Seguramente, ni Doctor Strange, un adinerado cuarentón que con sus poderes se mueve entre universos, hubiera anticipado lo que viene ocurriendo, ni Alejandro Gaviria, quien al mejor estilo de Walter Mercado, vaticinó cuál sería el carácter de Petro como presidente y cómo serían los primeros despidos del gabinete.
Los hitos de la nación
Las campañas a las alcaldías, gobernaciones y concejos ya se vienen moviendo hace un par de meses y el primer hito es la caída pronunciada de la popularidad de Petro, quien progresivamente viene radicalizando sus posiciones, atacando la separación de poderes y teniendo salidas en falso.
El segundo hito, es que el fenómeno de Francia Márquez, quien fue el batacazo de las elecciones, viene desinflándose con sus permanentes errores de comunicación, que pudieron ser evitados con planeación conjunta sus asesores y allegados.
Esto, nos lleva al tercer hito: la inexperiencia e improvisación de todo el Gobierno. No solo es Gustavo Petro y Francia Márquez, la mayoría de los personajes más importantes del gabinete han caído en errores, verdades a medias y contradicciones, que han llevado a que los principales ministros, que tenían un carácter más técnico y menos político, han salido como en el caso del propio Gaviria, Ocampo y López.
El último hito es el orden público y la ‘Paz Total’: es innegable la dificultad que detener un país en guerra con grupos armados y el narcotráfico que tienen presencia en todo el país. Sin embargo, la poca claridad y ejecución de esta hoja de ruta, han provocado el deterioro de las condiciones y el completo fracaso de los ceses al fuego poco planeados y verificados.
Colombia está viviendo una segunda “caguanización”, en la cual esas organizaciones armadas han utilizado la situación para crecer, fortalecer sus estructuras y consolidar territorios, mientras el Comisionado de Paz, “reconoce” que el ELN se atribuya los ataques a la Policía.
2016. El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, a la izquierda, y el comandante guerrillero Rodrigo Londoño durante la ceremonia de firma del acuerdo de paz en Cartagena, Colombia. Foto: Fernando Vergara/Associated Press
¿Qué hay de nuevo en la oposición?
Para efectos de estas elecciones, la contienda está servida en bandeja de plata. No obstante, tanto el Centro Democrático y Cambio Radical, quienes tienen las mayores capacidades políticas de enfrentar al sector de gobierno, siguen apelando a los mismos argumentos que en algún momento sirvieron, pero que hoy suenan anticuados.
La fórmula Uribe-Vargas Lleras como los delanteros del equipo, se nota desgastada teniendo en cuenta a la encuesta más reciente de Invamer, que pone al expresidente en un 32% de favorabilidad y a Vargas Lleras en 21%, ¿Es hora de buscar nuevos liderazgos y articular a toda la oposición?
Además, la propia victoria de Petro hablando de “cambio”, supone una patada al tablero que obliga a rediseñar la estrategia y prioridades históricas de estos sectores políticos: tiempo de reinventar la ‘Seguridad Democrática’.
La baja popularidad de Claudia López, Daniel Quintero o Jorge Iván Ospina, pueden ser el caldo de cultivo para repetir el ejemplo de las recientes elecciones autonómicas españolas.
El rol de los jóvenes
En todo esto, los jóvenes vienen cobrando más relevancia y son un público objetivo central, teniendo en cuenta que en los últimos años se han vuelto más activos dentro de la política. Según la encuesta de ‘Percepción de Jóvenes’ de Cifras y Conceptos y la Universidad del Rosario, Entre mayo de 2021 y mayo de 2023, los jóvenes que se declaran de derecha pasaron del 7% al 23%.
Esto sugiere que se podría estar rompiendo una suerte de “espiral del silencio” en la cual, los jóvenes que antes estarían escondiendo su afiliación y vienen teniendo una actividad más pública. No obstante, casi 6 de cada 10 jóvenes se declaran de centro. Por lo cual, son un segmento de la población importante para salir a buscar.
El último punto y de los más importantes, es la desconfianza en los partidos (80%), los influenciadores (80%) y el Congreso (72%).
Las últimas elecciones presidenciales y los recientes cuestionamientos a los influenciadores y personalidades del sector cultural, muestran un presumible desgaste a esta figura de influenciador militante, por lo que la oposición no debe repetir el mismo ejercicio del Pacto Histórico.
¿Entonces?
Faltan 5 meses cortos para las elecciones, la oposición colombiana está en un momento de inflexión, por lo cual “quemar las naves” es la única salida en esta campaña, buscando en limitar el crecimiento del sector progresista y de izquierda durante lo que resta de la década.
¿Se repetirá el 2016?