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Mijaíl Gorbachov, considerado el padre de la Perestroika y el último presidente que tuvo la Unión Soviética, murió a los 91 años de edad.
Su deceso fue confirmado por el Hospital Clínico Central de Moscú, donde era atendido de una grave y larga enfermedad. En el año 1990 recibió el Premio Nobel de Paz por su labor que llevó a la Unión Soviética a cambios estructurales de fondo desde 1985 cuando asumió el poder.
La Perestroika, como la conoció el mundo, consistió en abrir la economía de la Unión Soviética al mercado mundial. Cambios que no fueron muy bien recibidos por una parte del antiguo régimen comunista, y en 1991 miembros de la KGB intentaron un golpe de Estado para derrocarlo del gobierno. En diciembre de ese mismo año, Gorbachov demitió de su
cargo.
Sus quebrantos de salud, empezaron a comienzos de la pandemia cuando tuvo que ser hospitalizado y sus problemas se agudizaron.
Considerado como uno de los políticos más reformistas del siglo XX que abrió un camino hacia la democracia de la Rusia de hoy.